Desaparición de Cristina Bergua

La desaparición de Cristina Bergua es un caso abierto y sin resolver ocurrido el 9 de marzo de 1997 en Cornellà de Llobregat, nacida en el mismo municipio en 1980 y el principal sospechoso siempre fue su pareja, Francisco Javier Román, por lo que las pesquisas de la investigación priorizaron siempre que se pudiera tratar de un presunto feminicidio.

Su caso se convirtió en un punto de inflexión comunicativo gracias a la insistente reivindicación por parte de su familia, que comportó en primer lugar la creación de la Asociación de Personas Desaparecidas sin Causa Aparente (Inter-SOS).

Posteriormente, el legado de su desaparición y el activismo social en torno a estos hechos también influenciaron de forma primordial en la creación del Centro Nacional de Personas Desaparecidas español en el año 2018, y que a su vez derivó en la declaración el 9 de marzo como el Día de las Personas Desaparecidas Sin Causa Aparente en España.

Hechos 

El día de los hechos, Cristina Bergua Vera tenía la intención de encontrarse al anochecer con la que entonces era su pareja, Francisco Javier Román, a fin de poner fin a la relación sentimental que mantenían —según explicó posteriormente su círculo de amistades. Pese a que el pacto de la familia era el de avisar por teléfono o con una nota cuando no se llegaba a la hora a casa, la joven ese día no llegó a su casa a la hora prevista, alrededor de las 22 horas de la tarde. Esto desencadenó la preocupación instantánea de sus padres, Luisa Vera Martínez y Joan Bergua Funes, que llamaron a varias amistades de la joven e fueron a denunciar su desaparición en la comisaría esa misma noche. Sin embargo, la policía les pidió esperar algunas horas en caso de que se hubiera retrasado, por lo que no fue interpuesta hasta el día siguiente. 

Según Román, éste sólo le acompañó hasta la carretera de Esplugues, a pocos metros del domicilio familiar de Bergua, para despedirse. Aseguró que la pareja no había cortado, pero cuando se le informó de que la chica no aparecía se ha afirmado que se mostró impasible y no se ofreció en primer término a colaborar en su búsqueda. Fue en la carretera de Esplugues donde la chica fue vista por última vez. 

Días más tarde, una carta anónima que pedía buscar el cadáver de Bergua Vera en los contenedores de Cornellà alertó a la policía de hacerlo en el vertedero del Garraf, por lo que se registraron hasta 100 metros cuadrados de estas instalaciones (correspondientes a toda la basura de 1997 en Cornellà depositadas con anterioridad de la desaparición).  

Sin embargo, por retrasos consecutivos, lo empezaron a hacer transcurridos 11 meses después del aviso. Hubo varios problemas relacionados con el pago de los gastos de investigación y el elevado peligro de gases tóxicos por la fermentación de los desechos, que supuso la negativa de los operarios en varias ocasiones. Esto prolongó casi dos años la búsqueda y los desperdicios correspondientes al mes de marzo de 1997 no se acabaron de encontrar: la basura revuelta pertenecían a los meses anteriores y el mapa de disposición de los residuos no había sido el correcto. 

La familia no conoció estos hechos hasta que fueron públicos en marzo de 1998, dado que la búsqueda estuvo casi todo un año bajo secreto de sumario. 

Después de dos años, la investigación fue cerrada sin ningún desenlace en 1999. Sin embargo, se reabrió en 2008 por parte de los juzgados de Cornellà para intentar aplicar los nuevos avances en tecnología del ADN y de indagación policial, en caso de que alguna de las pistas o indicios hubiera podido pasar por alto. Sin embargo, esta última reapertura del caso no pudo esclarecer las causas de la desaparición o hallazgo de la joven. 

Homenaje 

Como conmemoración a Cristina Bergua Vera, al esfuerzo de su familia por encontrarla durante más de dos décadas ya la vez como homenaje a todas las personas desaparecidas sin ninguna causa aparente, un monolito en su recuerdo vela desde el 2018 el conocido como Espai Cristina Bergua en la calle Miranda de Cornellá de Llobregat, frente al domicilio de sus padres.